• El cobro judicial es un derecho de todo acreedor y hace parte esencial del mercado de crédito. Las ineficiencias en la recuperación de cartera pasan factura a los deudores, los acreedores y, en general, a toda la economía, toda vez que aumenta el costo de financiación y limita la expansión crediticia.
• La recuperación de cartera por la vía judicial es el último recurso al que acuden los establecimientos de crédito para recuperar el saldo incumplido, ya que generalmente este proceso, que conlleva largos períodos de tiempo, se vuelve costoso y dispendioso.
• La banca ha optado por prevenir el impago a través de robustos modelos de riesgo, sistemas de seguimiento que generan alertas ante el posible incumplimiento de los clientes y notificaciones para promover el pago oportuno, además de mejores prácticas en la recuperación temprana de la cartera morosa.
• Si bien es cierto que cada vez se deben buscar mejores mecanismos de recuperación, la eficacia de la administración de justicia es fundamental para incrementar el crédito y dinamizar la economía. Es por esto que Asobancaria hace un llamado para agilizar la administración de justicia y, además, para solucionar los inconvenientes que han surgido en los últimos años, como la demora en la práctica de despachos comisorios y los inconvenientes con el mal uso de la figura de la insolvencia para personas naturales no comerciantes.