• Literatura económica reciente ha indagado sobre la posibilidad de que un tamaño excesivo del sistema financiero con respecto al tamaño de la actividad económica pueda conducir a una reducción en el crecimiento de la producción. Esto último se conoce como la hipótesis “too much finance”, la cual sugiere que la relación entre profundización financiera y crecimiento económico tiene forma de U invertida.
• Asobancaria ha venido evaluando la hipótesis “too much finance” y, para el caso colombiano, las estimaciones señalan que el nivel de profundización “óptimo”, aquel que bajo las condiciones actuales maximiza el crecimiento de la economía, bordea en Colombia el 58% del PIB. Asimismo, la estimación sobre el nivel a partir del cual la mayor profundización conduce a un menor crecimiento económico, sugiere que dicho nivel se alcanza cuando la profundización bordea el 116% del PIB.
• Aunque los cifras resultan de gran relevancia para el análisis, en tanto que indica el nivel máximo de profundización financiera que una economía debería tener, en el caso de la economía colombiana este valor luce aún muy lejano con respecto a su profundización actual (47% del PIB), de manera que no se constituye como señal de alerta o preocupación para las autoridades de política económica.
• La economía todavía mantiene una brecha de profundización respecto a su óptimo, por lo que resulta imperativo eliminar las restricciones a la expansión crediticia, como el impuesto a las transacciones financieras o los topes a las tasas de interés. Así mismo, resulta imprescindible seguir avanzando en materia tanto de inclusión como de educación financiera. Lo anterior teniendo en cuenta que el desarrollo financiero va más allá del concepto de profundización financiera, por lo que es necesario no solo aumentar el crédito sino mejorar los niveles de uso y cobertura del sistema, así como el conocimiento de los productos y servicios por parte de la población.