El leasing habitacional ha aumentado su demanda en los últimos años y prueba de ello son los desembolsos que a septiembre de este año ya superaban los $2 billones para este tipo de financiamiento de vivienda. La principal ventaja para la banca es la propiedad del inmueble mientras el comprador lo paga por completo, y para el consumidor es recibir los mismos beneficios tributarios de un crédito hipotecario. De acuerdo con Asobancaria, en todo el 2015 se realizaron 21.000 desembolsos por $3,4 billones, mientras que en los primeros nueve meses de este año dicha actividad logró los $2,4 billones en un total de 14.000 operaciones, por lo que no parece difícil que, pese a la desaceleración de la economía, el leasing habitacional supere su registro del año anterior.