Esta tasa de interés es la máxima a la cual puede cobrar los bancos y generalmente a ella se pegan las compras que se hacen con tarjeta de crédito. Es decir, que por cada compra que se haga en los próximos meses, la financiación saldrá un poco más cara, según la entidad bancaria. (…) Qué tan cierto puede ser esto? Juan Camilo Berrío, director de inclusión financiera y medio de pago de Asobancaria, explica que desde luego el alza en la tasa de interés de los bancos ha subido en respuesta al incremento de la tasa de referencia del Banco de la República, la cual encarece la colocación de recursos de las entidades financieras en el público.