En lo corrido de 2013 el contexto internacional ha estado marcado por una lenta expansión de la economía mundial, por una mejoría moderada de la economía de los Estados Unidos y por un deterioro en el crecimiento de los países emergentes y de las economías en América Latina. Un aspecto que merece especial atención es el anuncio de la Reserva Federal (FED) de los Estados Unidos de un posible cambio en su política monetaria y sus efectos en el mercado local.
Este anuncio generó un aumento de las tasas de interés de los TES que representó cuantiosas pérdidas para las entidades, al punto que las pérdidas estimadas del sistema financiero a septiembre serían del orden de los 5.3 billones de pesos (equivalentes a 0.8% del PIB). Aunque los efectos registrados sobre el mercado de TES son consecuencia de la coyuntura internacional, algunos aspectos locales aumentaron los niveles de incertidumbre en el mercado, generando un mayor impacto en el mercado domestico frente a otros países de la región.
Teniendo en cuenta lo anterior, sería recomendable realizar algunas acciones para mitigar hacia el futuro los efectos negativos de los acontecimientos internacionales como: eliminar la incertidumbre generada por el proyecto de decreto de rentabilidad mínima para las administradoras de fondos de pensiones; divulgar de forma clara la política de endeudamiento (condiciones y referencias de las subastas y las modificaciones al cronograma de emisiones) del Gobierno Nacional para los creadores de mercado; corregir las distorsiones que se presentan en las curvas de rendimiento del mercado de deuda pública; y reducir de doce a tres meses el plazo para reclasificar las inversiones disponibles para la venta.
Resulta importante mencionar que la solución de largo plazo para enfrentar problemas de volatilidad generados por la coyuntura internacional está en el mayor desarrollo de los mercados financieros locales. En este sentido, los esfuerzos del Gobierno para estos propósitos están planteados en la Hoja de Ruta del Mercado de Valores, frente a la cual, aunque se han realizado algunos avances, vale la pena mencionar que existen temas que no se han abordado como la emisión del documento CONPES del mercado de valores, el cual permitiría fijar estrategias de largo plazo de desarrollo del mercado.
Adicionalmente, existen algunos temas de los que no ha vuelto a hablar el Ministerio de Hacienda, pero que revisten la mayor importancia. Entre estos, se destacan la revisión de la reglamentación cambiaria a la luz de estándares internacionales, los estudios diagnósticos del funcionamiento actual de los mercados de títulos de deuda y títulos participativos, y las iniciativas para promover la transferencia de riesgos a través de los mercados monetarios y de derivados. Sería del mayor interés saber qué lugar ocupan en la actualidad dentro de las prioridades del Gobierno.