Las entidades financieras en general tienen hoy la posibilidad de lanzar nuevos servicios y campañas al mercado incrementando las posibilidades de acertar. El camino hacia una nueva Colombia, que es el eje central de esta versión 51 de la Convención Bancaria, también lo está transitando el sector financiero del país, que, al igual que en el del resto del mundo, vive un momento de transformación definitivo. Lo estamos viviendo. Las entidades financieras se enfrentan a la gestión de grandes volúmenes de datos desbordados como consecuencia de las estrategias digitales de las entidades y la cada vez mayor utilización de canales electrónicos y sociales por parte de los usuarios. Es por esto que desafíos tradicionales como los de aumentar los niveles de seguridad de las transacciones, asegurar la confidencialidad de los datos, reducir los promedios de fraude y mejorar el servicio, hoy no son los únicos que se deben resolver.