Asobancaria en sus ochenta años de existencia ha sido partícipe de los más importantes acontecimientos económicos de Colombia. Desde su creación, ha trabajado para que el sector financiero sea el soporte de una economía que avanza de manera decidida hacia el primer mundo.
La disminución de la pobreza ha sido una de las conquistas sociales más importantes de nuestra historia reciente. Sin embargo, deben garantizarse condiciones económicas adecuadas para que no se propicien retrocesos en este campo. Creemos, en este escenario, que la pobreza se combate creciendo de manera sostenida e incluyente.
Desde la Asociación creemos firmemente que la equidad y la mejor distribución del ingreso se alcanzan cuando la economía está más cerca de su crecimiento potencial (entre 4,5% y 5,0%). Nos preocupa, sin embargo, el hecho de que algunas voces ya estén comenzando a vaticinar una caída en el potencial por cuenta de los choques recientes. Si bien la Paz o los proyectos 4G traerán consigo efectos virtuosos sobre el crecimiento potencial, lo cierto es que debemos generar una rápida convergencia a ritmos cercanos al 5,0% en los próximos años, si queremos superar los innumerables retos en materia de desarrollo.
En Asobancaria nos preocupan cinco elementos que podrían terminar minando la recuperación: i) la situación fiscal, ii) el marcado desbalance externo, iii) el sobreuso de efectivo, iv) los elevados niveles de informalidad y v) la elevada tasa de desempleo, superior al promedio regional.
La Asociación Bancaria plantea cinco propuestas que pueden ayudar a solventar parte de las dificultades: i) incluir en la próxima reforma tributaria un régimen simplificado en renta para el microempresariado, incentivos tributarios al uso de medios de pago electrónicos y establecer con la DIAN metas concretas de recaudo electrónico; ii) implementar algún mecanismo que garantice el registro único de pueblos y la definición de los plazos máximos para las consultas previas a comunidades y el trámite de licencias ambientales, elementos que permitirán dinamizar los proyectos de infraestructura 4G; iii) definir una hoja de ruta para el mercado de capitales que le permita avanzar en una senda de desarrollo y profundización; iv) mantener los incentivos tributarios tanto a la oferta como a la demanda para la adquisición de vivienda e v) incorporar en la agenda del Gobierno la Educación Financiera como uno de los grandes retos en materia educativa.