- El contexto macrofinanciero actual evidencia una fuerte desaceleración en el crecimiento económico del país y un persistente elevado costo de vida. Esta situación tiene efectos negativos en las dinámicas de consumo de la economía y en la capacidad de pago de los hogares.
- Esta situación adversa para los hogares ha representado los mayores niveles de vencimiento para la modalidad de consumo desde 2009. El mayor nivel de riesgo de los hogares también se ve reflejado en un incremento de las modificaciones y restructuraciones. Las entidades han venido aumentando las exigencias para otorgar créditos de consumo desde el año pasado.
- Los productos de libre inversión y tarjeta de crédito, especialmente para personas de menores ingresos, son los que han presentado mayor tendencia de vencimiento. La dificultad de los hogares para pagar sus obligaciones podría generar reportes negativos en centrales de riesgo y, de no normalizarse la situación, esto podría traducirse en exclusión financiera.
- Se estima que alrededor de 2 millones de personas podrían quedar excluidas del crédito por cuenta de esta coyuntura, lo que desde luego sería contraproducente en medio de los esfuerzos del sector financiero y el Gobierno para otorgar créditos por primera vez a 1 millón de personas en el marco del financiamiento a la Economía Popular y Comunitaria.
- Asobancaria celebra las medidas adoptadas por la Superintendencia Financiera, y que fueron propuestas por el sector financiero, encaminadas a seguir atendiendo de manera oportuna las necesidades de los consumidores y habilitarles mayores oportunidades para cumplir con sus obligaciones. Además, hace un llamado a la Superintendencia de Sociedades y la Superintendencia de Industria y Comercio para lograr la expedición de la normativa que asigne la supervisión a empresas “reparadoras de pago”, con el fin de proteger a los consumidores gestionados por estas.
- El sector financiero seguirá comprometido con la inclusión financiera de cada vez más personas, especialmente desde el crédito, en medio de una adecuada gestión de riesgos para salvaguardar los ahorros de los colombianos.