• Los modelos de negocio basados en el pago por uso han visto su auge en la última década en industrias donde los consumidores han migrado del «pago por la propiedad» al «pago por el uso que genere “x” resultado». Esta tendencia se conoció como «economía de la suscripción» y es precursora del cambio en segmentos gracias a la creciente automatización y digitalización de las operaciones industriales y manufactureras tradicionales.
• Los modelos de Equipment-as-a-service (EaaS) aparecen en el panorama como una señal directa de innovación para aquellos que producen, financian y comercializan activos productivos, pues pueden abordar más eficientemente las necesidades de las empresas. De hecho, a raíz de los efectos de la pandemia, son las empresas las que cada vez más demandan soluciones financieras que les permitan mantener la flexibilidad y resiliencia necesarias para afrontar las fluctuaciones e incertidumbre crecientes a nivel económico y en su mercado.
• En Colombia, los modelos de pago por uso aún no se han masificado. Sin embargo, en el país se ha fortalecido la oferta de productos (o servicio de productos) con servicios añadidos mediante el arrendamiento operativo y el renting. De hecho, el arrendamiento operativo es el tipo de leasing que ha tenido la mejor dinámica en los últimos meses, pues en el primer trimestre de 2021 su cartera alcanzó $3,03 billones (5,46% de la cartera de leasing), con un crecimiento de 10,1% real anual.