• En la actualidad, el tráfico ilegal de especies silvestres constituye el tercer tráfico más grande en el mundo después de las drogas ilícitas y las armas de fuego, ocasionando efectos irreversibles e incalculables en términos de diversidad biológica en el largo plazo. Sin embargo, más allá del impacto ambiental, la magnitud de este mercado genera que esta actividad delictiva constituya un alto riesgo para el Lavado de Activos dadas las grandes ganancias que generan estos delitos.
• Desde finales de 2019, el GAFI propuso entre sus objetivos principales para el periodo 2019- 20201, abordar y combatir los riesgos de Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo asociados al tráfico ilegal de la vida silvestre2. En ese sentido, se han creado unas líneas de trabajo para desarrollar buenas prácticas para los gobiernos y la industria privada que les permitan identificar y gestionar los riesgos derivados de los flujos financieros que genera este comercio ilegal.
• Se estima que el tráfico ilícito de especies silvestres mueve entre USD $9.000 millones y USD $20.0003 millones al año a través de grupos criminales organizados que se encuentran involucrados también en otras actividades delictivas. Estos se sienten atraídos por las bajas sentencias condenatorias y probabilidades de ser detectados, así como por la obtención de grandes ganancias.