• Actualmente, la región se encuentra en medio del proceso de la Cuarta Ronda de Evaluaciones
Mutuas del GAFILAT que analiza dos componentes relacionados entre sí en materia de
cumplimiento técnico y eficacia. Los resultados de dicha evaluación dejaron al país en
seguimiento intensificado, por lo tanto, se requiere de un trabajo colaborativo, continuo y
coordinado entre los actores del sector público y privado, para mejorar en aquellas
recomendaciones en las que no se obtuvieron las mejores calificaciones y consolidar un Sistema
ALA/CFT robusto y efectivo.
• Es necesario trabajar en la estrategia de desnarcotización propuesta por el GAFI, el Grupo
Egmont y nuestro Gobierno, velando por la necesidad de comprender, tipificar, prevenir y mitigar
otros delitos fuentes del LAFT, diferentes a los relacionados con el narcotráfico. Entre ellos se
encuentran, por ejemplo, (i) el contrabando, que según el Director de la Policía Fiscal y Aduanera
(POLFA), le cuesta al país alrededor de 6.000 millones de dólares al año y (ii) la corrupción
pública y privada, que durante los últimos años ha trascendido y convergido en la violación de
derechos humanos, y se ha instaurado en la sociedad como algo habitual que produce total
indiferencia.
• Las denominadas “FinTechs” y las nuevas tecnologías de manejo de información y activos
como, por ejemplo, los criptoactivos, han tomado mayor relevancia en las industrias, retando a
los sistemas en sus controles tradicionales. El GAFI ha reiterado su apoyo a estas nuevas
plataformas de financiación que están impulsando la innovación en el sector financiero; sin
embargo, ha resaltado la importancia de que se alineen con los estándares de este organismo en
materia de LAFT con el fin de evitar que se conviertan en mecanismos a través de los cuales se
blanqueen capitales