• Desde 2009 los principales Bancos Centrales han implementado medidas de política monetaria expansiva, tanto convencionales como no convencionales, con el fin de dinamizar sus economías. Esto produjo una holgada liquidez global que ha favorecido a los mercados emergentes. Sin embargo, el contexto internacional actual plantea la posibilidad de retomar la normalización monetaria. En efecto, tanto Japón como la Unión Europea ya han expresado su intención de iniciar planes de normalización tan pronto como sus condiciones económicas internas muestren mejores visos. Por su parte, Estados Unidos, que se ha delantado al proceso, ha emprendido a través de la FED una política de aumentos de tasas de interés y ha hecho explicito su deseo de reducir la
compra de activos y con ello su hoja de balance.
• Si bien el comportamiento de los TES en los últimos años ha venido respondiendo a la holgada liquidez global y a la reducción de las primas de riesgo de los países emergentes, durante la segunda parte de 2017 la curva de rendimientos de los títulos de deuda pública presentó un empinamiento importante. La política monetaria expansiva así como la incertidumbre asociada a la sostenibilidad de las finanzas públicas, está última agudizada tras la publicación del Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) en junio de 2017, contribuyeron a insertar volatilidad en los mercados. En lo corrido de 2018 el empinamiento se ha acentuado levemente en medio de la continuidad de la postura monetaria y el incremento de las tasas de interés de los bonos del tesoro asociado al debilitamiento de la posición fiscal en Estados Unidos.
• En 2018, las decisiones que tomen los bancos centrales de los países desarrollados sobre la normalización monetaria determinarán el comportamiento de los títulos de deuda colombianos. En Asobancaria estimamos que un incremento en la tasa de interés de la FED en 1% se transmitirá casi que de forma directa en el mercado local y una disminución en 1% de la hoja de balance causaría una desvalorización, particularmente en los tramos medios-largos de la curva de TES, de entre 10pb-40pb. A nivel interno, la evolución de la demanda agregada, la persistencia del anclaje de las expectativas inflacionarias y el proceso electoral serán también determinantes en la dinámica de los mercados.