En la Semana económica 760 iniciamos nuestro análisis de la reforma financiera estadounidense. En esa edición se trataron temas como la estructura del sistema financiero, el riesgo sistémico, el mercado de derivados, la regla Volcker, el riesgo moral, y la protección al consumidor financiero y al inversionista. En esta Semana realizamos un análisis más detallado de la reforma, ya que el pasado 21 de julio el presidente Barack Obama firmó el texto conciliado entre la Cámara de Representantes y el Senado, y se publicó la Ley No. 111-203, con el nombre Dodd-Frank Wall Street Reform and Consumer Protection Act.
La Ley tiene 848 páginas en su texto principal y 16 títulos. Es la más exhaustiva que se ha dictado en Estados Unidos. Trata temas estructurales y de organización del sistema financiero que afectan a todos los agentes del mercado, tratando de mejorar y fortalecer el funcionamiento de los órganos de regulación y supervisión. Cada uno de sus títulos, salvo por los dos últimos (15 y 16), son una respuesta a las falencias y vacios que dejó ver la crisis financiera internacional en su momento. Todavía no es posible entender completamente su impacto, ya que la ley establece un lineamiento general, pero prevé la realización y presentación al Congreso estadounidense de una serie de estudios acerca de los temas tratados, por lo que se cuentan aproximadamente 157 desarrollos reglamentarios.
Para Colombia no hay muchas cosas que se puedan tomar, porque, sin haber vivido una crisis tan profunda, localmente ya se habían adelantado regulatoriamente varios de los temas que hasta ahora se están introduciendo en Estados Unidos.
A pesar de que los desarrollos reglamentarios pueden demorar entre uno y tres años, es importante hacerles seguimiento para medir el impacto y alcance que tendrá esta ley en el funcionamiento del sistema financiero estadounidense.